Joe Dispenza es un importante doctor estadounidense, con estudios en diferentes ramas médicas y de neurociencia, ha dedicado gran parte de su vida a estudiar la capacidad de los seres humanos para recuperarse de enfermedades y atraer cambios en su vida mediante una disciplina personal que involucra la mente, el cuerpo y las emociones. Fue el propio Dispenza quien probara en su cuerpo la fórmula, haciendo posible volver a caminar sin someterse a una cirugía, luego de un accidente que le dañó algunas vértebras.
La fórmula del Dr. Dispenza nos asegura que es necesario involucrar no solo un proceso mental, de visualización, sino un proceso emocional desde el corazón, de sentir la emoción que nos proporciona el deseo cumplido. Ver y sentir como si ya lo que queremos se hubiera realizado.
Un importante aporte de Dispenza es el que nos hace reflexionar acerca de lo que pensamos. Si somos lo que pensamos, es necesario indagar de qué están compuestos los más de 60.000 pensamientos promedio diario que tenemos. Si pensamos en lo que nos ha sucedido en el pasado, o pensamos en lo que nos preocupa, en nuestras carencias, en aquellos que nos hicieron daño, entonces, dice el Dr. Joe Dispenza, estaremos recreando los eventos negativos de nuestra vida.
Por ello debemos cuidar nuestra mente. Contar con una disciplina diaria que nos permita construir el mundo que queremos, no el que lamentamos.
Las visualizaciones pueden ser una herramienta de mucha ayuda para lograr este objetivo. A través de éstas podemos construir las realidades que deseamos conectando nuestro deseo con la emoción y generando la energía necesaria para ayudarnos a soltar todos esos “pensamientos de ataque” que originamos desde el miedo.
Otro tema al que Dispenza también se refiere es al stress. Dice que vivimos muchas veces en modo de supervivencia, es decir, en modo crisis. Como si esta no fuera transitoria sino permanente. Hacer esto, condiciona nuestro sistema a estar en alerta con miedo y ansiedad, esperando siempre el peor desenlace, el cual, muy seguramente termina presentándose porque es lo que hemos atraído.
Para salir del modo “supervivencia”, es necesario “calibrar” nuestra mente y corazón, conectándonos con el amor. Si podemos durante unos minutos al día estar en silencio, respirando de manera consciente, viviendo el momento presente y acudiendo a la gratitud como estímulo, podremos bajar nuestros niveles de ansiedad, de cortisol y de imaginación destructiva para reemplazarlos por tranquilidad, receptividad y liberación de oxitocina, que es la hormona del amor.
Te invito a que me dejes acompañarte en la creación de visualizaciones que puedan ayudarte a originar tus pensamientos desde el amor, la luz, la abundancia y la confianza para así transformar no solo tus pensamientos sino tus realidades.